La quinta edición del Gastrofestival consolida la feria en Madrid
El pasado domingo, 9 de febrero, el Gastrofestival de Madrid puso el cierre a la que ha sido su quinta edición, y quizá la que ha congregado a más visitantes y clientes en la gran variedad de actividades presentadas este año. Menús a precios especiales, catas, rutas por la ciudad o preparación de alimentos en directo han sido las apuestas más fuertes entre las experiencias culinarias marcadas por los organizadores del festival, una cita que se celebra coincidiendo con el evento anual Madrid Fusión.
Una apuesta gastronómica para madrileños y turistas
Durante más de dos semanas, más de 400 establecimientos madrileños han participado en esta quinta edición del Gastrofestival, en alguna de las actividades programadas. Restaurantes, coctelerías, escuelas de cocina, tiendas gourmet, de ropa y complementos, instituciones culturales, galerías de arte y museos han formado parte del programa que este año se ha dividido en seis grandes categorías: Experiencias Sensoriales, Gastrocultura, Madrid Gastronómico, Gastrofashion, Gastrosalud y Diseño y Gastronomía.
Algunas de las experiencias que han generado una mejor acogida han sido las rutas gastronómicas por la capital. Estos recorridos los ha realizado Make my Day in Madrid, quien ha llevado a los visitantes a conocer a qué sabe Madrid en sus dos propuestas: «Madrid a cuerpo de rey» y «Madrid, un viaje gastronómico por España», con una selección de tapas y raciones para degustar.
Otras experiencias han tenido lugar en escenarios míticos de la gastronomía madrileña, como es la chololatería de San Ginés, donde se se celebró una tertulia literaria en clave culinaria, la llamada «Mediendas literarias». O también en centros estratégicos de la ciudad, como la Fnac, que organizó un taller de cupcakes, o el Museo del Prado, que ha ofrecido el itinerario «Dulces y vino».
Menús de calidad y tapas a precios populares
Otra de las propuestas más aclamadas ha sido la de «Menús by Elle», una iniciativa que reunió a 40 establecimientos de calidad cuyos menús suelen superar los 50 euros, y que en esta ocasión los han ofrecido a 35 euros, con el objetivo de fidelizar al cliente que demuestra un gusto por la alta cocina.
Para los amantes de la caña y la tapa se ha desarrollado el «Degustatapas«, una propuesta que incluye tapa y botellín por 3 euros en distintos locales de la ciudad. Y muchos son los que se han decantado por el vino con la experiencia «Nuestras barras favoritas con un Rioja«, que ha ofrecido tapa y vino de Rioja por 6 euros.
Exposiciones, conferencias, visitas, cursos de cocina… el abanico de experiencias gastronómicas ha sido amplísimo, en la que ha sido una cita ya consolidada en el calendario madrileño, y que ha bañado de olores y sabores las calles de Madrid.