Dónde comer en Lisboa es lo que los viajeros se preguntan al visitar esta magnifica ciudad.
Lisboa es una de nuestras escapadas de fin de semana preferidas y nunca defrauda. Te recomendamos perderte por sus calles y disfrutar de su encanto decadente.
En nuestras diferentes visitas hemos conocido una gran variedad de su oferta gastronómica.
En este post hemos querido completar esos huecos de la hora de comer en una escapada de fin de semana, dando opciones para desayunar, almorzar, comer, merendar y cenar. A continuación os dejamos nuestros destacados para un día en la capital portuguesa.
Desayunar en Lisboa
Si eres de los que les gusta desayunar como un rey, y en el hotel no te gusta su buffet libre, Tartine es tu lugar. Puedes tomar desde un café tradicional a un completo brunch. Está ubicado en El Barrio alto de Lisboa, a escasos metros de uno de los tramos comerciales más importantes de la capital lusa.
Comer en Lisboa
Hemos probado muchos establecimiento para comer en Lisboa, pero nos quedamos con Cantinho do Avillez. Este restaurante lo visitamos en el 2015. Su cocinero es José Avillez, galardonado con estrella michelín en Belcanto, situado justo en frente de Tartine.
Merendar en Lisboa
Puedes disfrutar de un paseo hasta la torre de Belem pasando por la catedral de los Jerónimos y premiarte con unos fabulosos pasteis de Belem. Recién hechos son una autentica delicia.
Que no te engañen con cualquier copia, vete a por el original. La cola parece larga pero van bastante rápido.
Cenar en Lisboa
Cenar en El Barrio alto en el restaurante italiano Esperança. Merece la pena ir por la noche en primavera – verano y sentarse en las mesitas adosadas a la fachada, para contagiarse de la alegría de las calles y ver el bullicio nocturno. Pero hasta que llegue el buen tiempo habrá que conformarse con su acogedor interior.
Mercado da Riveira (Time Out Lisboa) Ubicado junto a la desembocadura del Tajo. La oferta gastronómica es muy amplia, desde portuguesa tradicional a internacional. Espacio industrial, en el que los locales se sitúan perimetralmente y el espacio central se destina a bancos corridos para sentarte a comer o a beber. Recomendable si vais un grupo grande de amigos por la variedad que hay (no a todos nos gusta siempre lo mismo).
Nosotros elegimos en varios puestos tartar de atún, bacalao a bras, arroz de ternera y mucha SuperBock.
Somos unos enamorados del país vecino, tanto por la oferta gastronómica como por los paisajes y ciudades. Si tienes pensado hacer un roadtrip, puedes completar tu visita a Lisboa con el post «Qué comer en Oporto y el norte de Portugal»
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