Es uno de los restaurantes más conocidos del centro de Madrid. Desde su inauguración, el 26 de septiembre de 2013, se ha convertido en todo un referente de las noches gastronómicas de la capital. La Pescadería, uno de las nuevas creaciones del grupo Lamucca, nos abre sus puertas para disfrutar de una velada de cocina mediterránea en Malasaña.
Fusión de estilos en la cocina y la decoración
Al abrir la puerta de La Pescadería lo primero que sorprende es la mezcla de estilos que decora el local. Cada mesa, concienzudamente diseñada para parejas o grupos, para amigos o familias, en reuniones de trabajo o encuentros inesperados, evoca un ambiente distinto en el que disfrutar de su buena comida. De fondo, una bonita banda sonora musical que gusta, sin molestar e interrumpir en la mesa.
Las señas de identidad de La Pescadería se dejan ver en cada detalle: en el diseño de la carta, en los baños, en la zona de la barra y, por supuesto, en la preparación y presentación de sus platos. En sus dos plantas predomina un estilo industrial, con muebles de hierro e iluminación fría, pero reservando pequeños rincones más tenues y silenciosos o una terraza muy agradable con sillas rígidas y muchas plantas.
Raciones variadas y platos mediterráneos
La carta ofrece una amplia variedad de raciones para compartir o de platos individuales, de verdura, carne y pescado. También disponen de una rica oferta de postres, una buena selección de vinos, y una carta de cócteles y combinados para terminar la velada.
En nuestra visita, nos decidimos por dos entrantes y dos platos principales.
Primero probamos las croquetas de cabrales con nueces, que literalmente se deshacían en la boca. También pueden ser de jamón. Y después, los buñuelos de bacalao con salsa de piquillo, con un empanado muy fino y muy buen sabor.
De principales escogimos el tartar de salmón, presente ya en prácticamente todas las cartas de estos restaurantes fusión y que ofrecía un sabor muy fresco y natural, y kebab de cerdo ibérico con salsa de yogur picante, un original plato acompañado de ensalada de queso, pepino y tomate.
Y de postre, torrijas con helado de vainilla, muy bien hechas.
La selección fue difícil ya que nos gustaban bastantes platos: mousse de foia con piña y chutney de tomate, los tacos de rabo de toro (nos los habían recomendado), el ceviche de corvina o el risotto de boletus y shitake. Sin duda, volveremos para probar éstos y otros platos de la carta.
La Pescadería es una perfecta opción para ir a comer entre semana, para disfrutar de una cena de sábado o una celebración entre amigos. El precio no es excesivamente caro pero tampoco barato: una comida para dos con dos entrantes, dos principales, la bebida y un postre, alrededor de 48 euros. Y el servicio requiere una mención especial; en todo momento se preocuparon por lo que pudiéramos necesitar con una atención muy cercana.
La Pescadería
C/ de la Ballesta, 32
28004 – Madrid
91 523 90 51
barlapescaderia@gmail.com
